Hay poco intangible en la música que acompaña a los Mundiales de League of Legends. No es solo la producción, ni la animación de los videoclips. Es esa capacidad de convertir un momento competitivo en una experiencia emocional. Riot Games entendió esto muy pronto. Desde «Warriors» de Imagine Dragons en 2014 hasta el colosal impacto de «GODS» en 2023, cada año ha traído un tema que se graba en la memoria colectiva de los fans.
Y no es casualidad. Riot no solo reto por la música como un complemento y ya está, sino que la integra en la identidad de su universo competitivo, dándole el mismo trato y cuidándola igual que a los eventos o a los campeones. Por eso, cuando suena el primer conforme del tema de Worlds, poco se activa en nuestro interior. La piel se nos eriza. La historia comienza.
«Awaken», «Phoenix» y los abriles en los que todo fue más noble
En 2019, Riot nos regaló uno de sus videoclips más espectaculares: «Awaken», interpretado por Valerie Broussard y Ray Chen. A nivel de producción, fue una obra maestra: una animación fluida, una novelística visual impactante y referencias directas a los campeones más queridos. Pero lo que la convirtió en una de las favoritas fue su tono épico y melancólico a la vez. Awaken no hablaba solo de disputar, hablaba de despertar poco en el interior.
Ese mismo año, el tema de Worlds fue «Phoenix», interpretado por Cailin Russo y Chrissy Costanza. Y aquí tengo que quitarme el sombrero: probablemente es una de mis canciones favoritas de todas las que se han hecho para Worlds, pero probablemente sea por razones personales —aunque es un temazo— . Los mundiales de 2019 son los primeros que cubrí como periodista, estuve en Madrid, luego en París, y comportarse ese tema en directo fue poco indescriptible. La energía del sabido cuando sonó en la pedazo de ceremonia que se marcaron, los visuales, las luces, y el mensaje: «tienes que conquistar al monstruo en tu individuo y entonces volarás». Es una canción que representa lo que significa competir.
Imagen del videoclip de «Phoenix»
Muchos la compararon con «Rise», el tema de 2018, igualmente icónico. Pero yo creo que «Phoenix» conectó de una foma más introspectiva. No solo hablaba de vencer al rival, sino de vencerse a uno mismo y a todas esas cosas que nos frenan.
«GODS», «Star Walkin'» y la transformación del sonido Riot
En 2023, Riot apostó por poco más indeterminado y agresivo con «GODS», interpretado por NewJeans. La comicios sorprendió a muchos: un liga de K-pop afeminado para un tema de Worlds parecía arriesgado. Pero el hecho es que funcionó. La canción mezclaba una estética cruda con un beat de estilo industrial, y el videoclip presentaba una novelística súper intensa centrada en Faker, la inscripción viva de League of Legends. Fue un homenaje a los dioses del colección… y a los que aspiran a serlo.
El año antedicho, en 2022, Riot rompió esquemas al colaborar con Lil Nas X en «Star Walkin». Fue una reto fresca, más pop, con un videoclip saciado de referencias urbanas. Aunque no fue del alegría de todos —del mío sí, la verdad— pero sí que marcó una nueva dirección: Riot podía rebosar de lo épico y seguir conectando con su gentío.
Imagen del videoclip de «Star Walkin»
Estos dos temas de alguna forma mostraron que Riot ya no tenía miedo de explorar sonidos diferentes, adaptarse a distintos estilos y públicos. Pero igualmente dejaron claro que había poco que no cambiaría nunca: cada canción tenía que emocionar.
Y llegó 2024: la mejor canción para los que amamos Linkin Park
El tema de Worlds 2024 fue una arrebato de energía rock/alternativa que hizo moverse a una comunidad entera. Titulada «Heavy is the Crown» y desarrollada por Linkin Park, fue un mega homenaje emocional al estilo nu-metal de los 2000. Para los que crecimos con Chester Bennington y Mike Shinoda como referentes, escuchar ese sonido adaptado al universo de League fue casi un regalo —es que se me eriza la piel solo de contarlo—.
Y obviamente aquí no lo digo solo como periodista sino como fan. Desde los primeros segundos, «Heavy is the crown» me transportó a esa época en la que escuchaba «In the End» en caracolillo (cosa que muy frecuentemente sigo haciendo). Su pago, centrada en el peso del poder, de la triunfo y de la triunfo, encaja perfectamente con la novelística de los equipos que luchaban por la corona ese año.
Por otra parte, el videoclip —que nos regala unos momentazos increíbles, véase el minuto 2:35— es quimérico. Para mi es, sin duda, el tema más potente emocionalmente desde «Warriors». Te diría que incluso es el mejor.
¿Por qué nos tocan tanto estas canciones?
Porque están hechas para sentirse. Riot no escoge artistas al azar. Cada canción se piensa para contar poco que va más allá del torneo. Son retratos sonoros de lo que implica competir, fracasar, levantarse. Cada año, el tema de Worlds palabra de todos nosotros: de quienes han fallado, de quienes dudan, de quienes lo intentan otra vez.
Por otra parte, no se comercio solo de música. Es novelística. Es identidad. Es marca. Los videoclips de Worlds funcionan como pequeños cortometrajes que nos recuerdan por qué seguimos aquí, por qué seguimos jugando, por qué nos importa.
Y no solo son los temas de Worlds. Proyectos como K/DA, True Damage o Pentakill han expandido el universo musical de Riot a niveles que muy pocos estudios han corto. K/DA, por ejemplo, sigue siendo un engendro de marketing y producción desde que debutó con «POP/STARS» en 2018. Y Pentakill, con su estética metalera, ha hecho hasta conciertos virtuales.
En 2025, Riot ha confirmado que volverá a colocar por un enfoque colaborativo para su próximo tema de Worlds, con algún rumor sonando por ahí de una alianza con artistas de la imagen electrónica japonesa. Sea como sea, la expectativa ya está en nuestros corazones. Porque cada vez que Riot aguijada una canción, no esperamos solo un hit. Esperamos una conexión.
Quizá por eso seguimos volviendo a «Awaken», a «Phoenix», a «Heavy is the Crown». No por nostalgia, sino porque esas canciones capturan momentos que no queremos soltar. Son parte de nuestra historia como jugadores, como fans, como personas que encuentran en la música un refugio. Sabremos que es tiempo de Worlds. Que la Fisura vuelve a ruborizarse. Que las historias se reescriben. Y que, una vez más, una canción nos acompañará para sentirlo todo.
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